10 sitios arqueológicos que todo arquitecto debería debe visitar en el Perú
- 16:00 - 6 Abril, 2017
- por Delia Bayona
En Perú, no puedes vivir, pasar sin conocer ni, mucho menos, dejar de aprender las lecciones del legado arquitectónico milenario de algunos de sus tantos sitios arqueológicos -19.903 para ser exactos-. Estos lugares están llenos de inspiración, arte, historia, leyendas; magia al fin y al cabo, que vale conocer y detenerse en el tiempo para apreciar hasta los detalles. Son historias plasmadas en arquitectura, cuyos vestigios atesoran misterios que quizás nos dejen más preguntas que respuestas, pero ahí está ese poder de maravillarnos que todo arquitecto sabrá atrapar para seguir el viaje con una visión más enriquecida.
Podríamos escribir bellezas, pero es mejor conocerlas. Así, esta pequeña lista es, más que una invitación, una provocación de los sentidos que va dedicada al alma del arquitecto-viajero. Para muestra, un botón.
Machu Picchu
“Montaña Vieja”. Al sur del Perú, en el valle de Urubamba. MachuPicchu, Cuzco.
El Santuario histórico de Machu Picchu es un conjunto cultural y ecológico que fue un antiguo poblado andino (llaqta incaica), construido antes del siglo XV en el promontorio rocoso que une las montañas Machu Picchu y Huayna Picchu en la vertiente oriental de la cordillera Central. Es una obra maestra de la arquitectura y la ingeniería por sus magníficas construcciones en piedra que conforman escalonamientos, andenerías y recorridos de una ciudadela que se emplaza en el paisaje con sabiduría. A lo largo de su existencia ha entretejido todo un velo de misterio.
Caral
En la ciudad sagrada de Caral. Al norte de Lima, en el valle del río Supe
Es la ciudad más antigua del Perú, con más de 5000 años de antigüedad, por lo que es el centro de civilización más antiguo de las Américas. La ciudad de las pirámides, los Conjuntos residenciales y las plazas circulares. Es impresionante por la concepción y complejidad de sus elementos arquitectónicos y espaciales, sobre todo por las plataformas monumentales de piedra y tierra, así como por los patios circulares bajos.
Pachacámac
“Alma de la Tierra”. Al sur de Lima, en el valle de Lurín.
Conjunto arqueológico que fue el centro religioso-ceremonial más importante de la costa central del Perú por más de 1500 años durante el periodo preincaico e incaico. Su prestigio se debía principalmente a su oráculo, pues antiguos pobladores procedentes de todo el país en largas peregrinaciones formaban parte de un gran ritual andino.
Puruchuco
“Sombrero de Plumas”. Costa. Al norte de Lima, en el Distrito de Ate.
Fue un centro administrativo del período Inca. Se puede encontrar diferentes expresiones arquitectónicas que datan de diferentes periodos culturales: las pirámides con rampa, uno de los cementerios inca más grande en la costa central y un palacio que habría pertenecido a un curaca de la élite inca, que gobernaba y administraba el territorio y la producción de la zona.
Chan Chan
"Sol Resplandeciente" En la costa norte del Perú, al noroeste de Trujillo.
Es la ciudad construida en adobe más grande de América y la segunda en el mundo. Está formada por nueve ciudadelas o pequeñas ciudades amuralladas. Todo el conjunto fue la capital del reino Chimor, organización estatal de la cultura Chimú.
Sacsayhuamán
"Lugar donde se sacia el halcón". Al norte de la ciudad del Cuzco.
La "fortaleza ceremonial" de Sacsayhuamán es con sus muros megalíticos, la mayor obra arquitectónica que realizaron los incas durante su apogeo. Desde la fortaleza se observa una singular vista panorámica de los entornos, incluyendo la ciudad del Cuzco, según el cronista mestizo Inca Garcilaso de la Vega.
Pikillacta
“Pueblo de las Pulgas”. En el distrito de Lucre, al sureste de la ciudad del Cuzco
Conformado por los restos de una ciudad del Antiguo Perú, de la era prehispánica. Abarca un área aproximada de unas 50 hectáreas en la cuenca del río Lucre y en un ambiente del curso del río Vilcanota. Fue uno de los más importantes centros administrativos-cultistas de la cultura wari, entre los siglos VI al IX de nuestra era, y representa el urbanismo planificado wari por excelencia. Se hallan vestigios de las kanchas, tipología que agrupada conformaba todo un sistema modular en base a los textiles wari.
Chavín
Al noroeste de Lima, en el distrito de Chavín de Huántar, Ancash.
Fue el centro administrativo y religioso de la cultura Chavín, construido y ocupado aproximadamente entre los años 1500 y 300 a.C. Sus estructuras, de forma de pirámide trunca, están hechas a base de piedra y de barro, son una muestra sobresaliente del arte de construir de los antiguos pobladores por el alto grado de perfección alcanzado en materia de ingeniería, en el tallado y pulido de las piedras y en la litoescultura asociada a su arquitectura. Es una compleja red de caminos y galerías interiores de piedra.
Huaca de la Luna
Costa norte del Perú, en La Libertad. Se encuentra cerca a la Huaca del Sol, entre las dos huacas se hallaba la ciudad.
Construida por la cultura Moche. Plataformas y plazas delimitadas por grandes muros de adobe que sirven de áreas de interconexión destacan por encontrarse superpuestas y construidas en diferentes períodos. Los componentes más destacados del edificio son los relieves en sus pinturas murales de cinco colores que representan, entre otras figuras, las características y atributos de la divinidad moche llamada Ai apaec, el dios degollador.
Kuélap
Al noreste del Perú, en la Provincia de Luya, Amazonas.
Sitio pre inca que fue construido por la cultura Chachapoyas. Forma un conjunto arquitectónico de piedra de grandes dimensiones caracterizado por su condición monumental, con una gran plataforma artificial asentada sobre la cresta de roca calcárea en la cima del cerro. Sus colosales murallas y su compleja arquitectura interior son evidencias de su función como un conjunto poblacional bien organizado, que incluye recintos de índole administrativa, religiosa, espacios ceremoniales y de residencia permanente.
Líneas de Nazca
En las Pampas de Jumana, en el desierto de Nazca. Ica.
Antiguos geoglifos que fueron trazados por la cultura nazca. Estas líneas están compuestas por varios cientos de figuras que abarcan desde diseños tan simples como líneas hasta complejas figuras zoomorfas, fitomorfas y geométricas que aparecen trazadas sobre la superficie terrestre.
No fueron 10, sino 11. Este último fue obsequio. El colibrí o cualquier otra de las iconografías de las líneas de Nazca delinean un sitio fundamental que debe ser visitado por todo arquitecto para que se quede grabada esa sensación desde el aire, con vista de pájaro, que vuela alto con una perspectiva amplia siempre.
Cabe decir que faltó citar tantos sitios, el camino inca o la ciudad entera de Cuzco merecen un artículo aparte. En fin, la lista siempre quedará pequeña o será cuestionable y hasta increíble. La única verdad es que si hoy en día tenemos testimonios vivos de arquitectura antigua, es para darles su lugar y escuchar e interpretar o al menos observar lo que nos cuentan del pasado, para proyectar una arquitectura contemporánea que sea consecuente y armoniosa.