El presidente de la República, Pedro Castillo,
informó que el Gobierno dejó sin efecto la tarde de este martes, el
toque de queda anunciado la noche del último lunes 4 de abril, en medio
de las protestas por el paro de transportistas.
“Debo
anunciar que a partir de momento vamos a dejar sin efecto esta
inamovilidad y corresponde llamar a la tranquilidad del pueblo peruano”, señaló el mandatario.
#LOÚLTIMO
El presidente Pedro Castillo anuncia que se deja sin efecto el decreto
supremo que ordena la inmovilización obligatoria. Llama a la
tranquilidad a la ciudadanía @Politica_ECpe
Durante
su intervención, el mandatario cuestionó que se utilice un derecho
constitucional como la protesta para avalar actitudes como el bloqueo de carreteras, el ataque a la propiedad privada y las entidades públicas.
“Cuando
se asume una medida a la espera de que la actitud y el derecho que
tienen los peruanos y los ciudadanos en manifestarse como derecho, eso
no significa que aprovechándose de esa movilización, de un derecho
constitucional, también nosotros como Estado avalemos algunas actitudes
que van más allá, como el bloqueo de carreteras, apedrear un domicilio,
atentar contra la propiedad privada y las instituciones públicas”, expresó.
Finalmente, el mandatario consideró importante que los poderes del Estado están para servir al país y “salvaguardar la vida de nuestros compatriotas”.
Como se recuerda, la noche del último lunes el presidente Pedro Castillo
dio un mensaje a la Nación, donde anunció que este martes 5 de abril
regirá un toque de queda, luego de los disturbios y saqueos ocurridos
durante el paro de transportistas.
“El
Consejo de Ministros ha aprobado declarar la inamovilidad ciudadana
desde las 2 de la mañana hasta las 11:59 de la noche del día martes 5 de
abril, para resguardar los derechos fundamentales de todas las
personas”, acotó el jefe de Estado.
Capacitación y creación de
conciencia sobre la importancia de adoptar prácticas cotidianas de
limpieza y control son vitales en las instituciones hospitalarias.
La limpieza
se ha asociado siempre y de manera inseparable con la salud, y es una
condición imprescindible para garantizar una avanzada atención médica.
En consecuencia, el trabajo de los departamentos de servicios de
mantenimiento de cada una de las instalaciones de la institución y de
control de infecciones es vital en hospitales y centros donde se
administran servicios de salud.
El tema de la limpieza y su incidencia en el control y prevención de
enfermedades ha sido ampliamente documentado en publicaciones como las Directrices para el control de infecciones en instalaciones médicas, las Recomendaciones para el control y prevención de enfermedades y las Prácticas de control de infecciones de distintas entidades que trabajan de cerca con la Asociación de Hospitales de Estados Unidos.
Después del lavado de las manos, el aseo del entorno es la manera más
efectiva de evitar la propagación de infecciones adquiridas. Las
bacterias presentes en diferentes superficies pueden vivir durante
horas, incluso días, y eliminándolas mediante una apropiada limpieza se
rompe la cadena de infección a la que dan lugar.
Trabajo conjunto
Como parte de las prácticas comunes identificadas para prevenir las
infecciones, el trabajo mancomunado de los departamentos de
mantenimiento de cada una de las instalaciones y de control de
infecciones ha demostrado su efectividad. De la experiencia acumulada,
se consideran hoy factores como la decisión sobre los métodos y
productos de limpieza que deben utilizarse en las diferentes áreas de
una instalación.
Un primer paso consiste en decidir el nivel de contacto de las manos
con un área o superficie determinada, la probabilidad de que esta área
se contamine con sangre o con fluidos corporales y la cantidad de
pacientes que transita por el área. En estrecha relación con los
anteriores factores, es crucial la elección del tipo de equipo y los
materiales utilizados en las labores de limpieza, tratando de optar
siempre por aquellos que garanticen la mejor solución de acuerdo con la
disponibilidad presupuestal, su efectividad y adecuado manejo por parte
de quienes tendrán a cargo su manipulación.
Áreas de especial atención Los programas de limpieza de
instalaciones hospitalarias identifican claramente áreas de especial
atención como rieles de las camas, perillas de las puertas e
interruptores de luz, con los que tienen contacto por igual pacientes,
visitantes y personal hospitalario.
En áreas donde los pisos están expuestos al contacto con sangre o
fluidos corporales (quirófanos, salas de urgencias, habitaciones de los
pacientes), la limpieza deberá realizarse con detergentes y
desinfectantes adecuados.
La limpieza de los equipos médicos es otro factor al que debe
prestarse especial atención, destinándose a ésta personas capacitadas
que realicen el trabajo de manera regular y profesional.
Una cultura de limpieza Pero quizá uno de los componentes más
efectivos ante una actividad que demanda un compromiso permanente, sea
el de la capacitación y la creación de una conciencia sobre la
importancia de adoptar prácticas cotidianas de limpieza y control. Los
programas de capacitación recomendados por entidades especializadas
sugieren que la efectividad de realizar demostraciones en vivo de las
tareas de limpieza; la certeza sobre la comprensión por parte del
personal del proceso de transmisión de las infecciones; y el énfasis
sobre el hecho de que la efectividad de la limpieza se obtiene cuando se
realizan las labores de manera completa y consistente, son todos
componentes cruciales para garantizar la protección de la salud en una
instalación hospitalaria.
Propiciar la adopción de esta cultura depende en gran medida del
acercamiento con el personal a cargo de las labores de limpieza y de
control de las infecciones. La experiencia de Carolyn Bractcher,
coordinadora de control de infecciones del hospital St. Mary, en
Richmond, Virginia, es ilustrativa. Carolyn organiza reuniones mensuales
con los empleados en las que explica en términos sencillos y prácticos
los principios de una cultura de la limpieza. "Si se logra una buena
afinidad con las personas de los equipos de limpieza y de control de
infecciones, ellos responderán positivamente... Una buena relación con
estos equipos es una de los aspectos más importantes para lograr las
condiciones de limpieza de un lugar donde se prestan servicios de
salud."